Salimos el día 24 del corriente, a las 7 de la mañana del jardín del Santo Angel, un grupo compuesto por 52 personas, con dirección a Gijón. Después de las paradas reglamentarias, para descanso del conductor, paramos en el área de servicio de Tudanca, en Benavente (Zamora), para comer y al finalizar la misma, con no mucha calidad por cierto, seguimos dirección a nuestro destino, donde llegamos aproximadamente, a las 19 horas. Reparto de habitaciones. A las 21 horas, cena, un paseo por los alrededores del hotel, llamado BEGOÑA, en el centro de la ciudad, y a descansar del largo viaje.
Lo mejor del hotel, su ubicación en el centro de la ciudad. Hotel limpio, habitaciones no muy grandes pero acogedoras, las paredes sin aislamiento, lo que hace que se oigan todos los ruidos de las habitaciones adyacentes, la comida regular, no por la calidad de la comida, sino su preparación, poca verdura, y poca fruta del tiempo. El personal y la dirección bastantes amables . Se pueden repetir todos los platos. Se sobreentiende que no es buffet.
No hay comentarios:
Publicar un comentario